«Estoy demasiado triste como para contártelo», Fotografía de Ader Bas Jan
A un viajero sin órbita
Te sentí.... y quería decirte tantas cosas,
las palabras fueron para mí como tristes sepulturas
en la que dormitan en silencio
los sentimientos atados para la eternidad.
Intensas vibraciones de mi alma,
que rebozan de pureza con la fosforescencia del amor,
pero que, opacadas por la realidad, deben descansar.
Si pudiera tan solo habitar en la intensidad de los momentos,
absorber los instantes que no quieren ser recuerdos.
Podría tan siquiera redimir este inocente divague,
que latente de una esencia tan pura, añora alcanzarte.
Palabra, en otro tiempo fuiste mi aliada,
y ahora me sentencias oscuramente a callar.
Dentro de mi alma habitan ahora tus verdades,
una condena irremediable que hará del amor una idealidad.
Tu canto cadencioso de estrellas desparramadas
serán sustento irremediable para que encuentre un poco de paz.
las palabras fueron para mí como tristes sepulturas
en la que dormitan en silencio
los sentimientos atados para la eternidad.
Intensas vibraciones de mi alma,
que rebozan de pureza con la fosforescencia del amor,
pero que, opacadas por la realidad, deben descansar.
Si pudiera tan solo habitar en la intensidad de los momentos,
absorber los instantes que no quieren ser recuerdos.
Podría tan siquiera redimir este inocente divague,
que latente de una esencia tan pura, añora alcanzarte.
Palabra, en otro tiempo fuiste mi aliada,
y ahora me sentencias oscuramente a callar.
Dentro de mi alma habitan ahora tus verdades,
una condena irremediable que hará del amor una idealidad.
Tu canto cadencioso de estrellas desparramadas
serán sustento irremediable para que encuentre un poco de paz.
Huella, Daily Jara ©
23-08-2012